domingo, 17 de junio de 2012

No ha parado de llover

17/06/2012. Domingo. Hoy se ha vuelto a despertar el DF totalmente tapado y con nubes oscuras. Por si no era duro tener que trabajar en domingo, el día nos ha regalado una continua lluvia que no ha parado en ningún instante. Por momentos arreciaba la lluvia, y una de las veces ha coincidido con nuestro camino hacia la oficina, a primera  hora de la tarde. Hay que decir que no íbamos demasiado preparados, porque un paraguas individual para tres personas no alcanzaba. Nos hemos pasado la mañana en la oficina y a la hora de comer hemos podido ver el partido Holanda – Portugal, en el que la escuadra lusa se ha clasificado para los cuartos de final, gracias a los 2 goles de Cristiano Ronaldo.
Hoy hemos vuelto a comer en uno de nuestros restaurantes favoritos. Además de comida mexicana, hacen mucha comida española y la mezclamos para poder degustar un poco de todo. El menú de hoy ha consistido en unos huevos cocidos rellenos de atún y mayonesa (típicos de aquí de México, aunque no recuerdo de qué zona), una sopa Azteca (con trocitos de tortitas), y paella valenciana como plato fuerte. Nos hemos arriesgado mucho con la paella, ya que no tenemos mucha suerte con este tipo de platos en los restaurantes que hacen algo de comida española. Y he de decir que la paella ha dejado algo que desear, a pesar de que el aspecto era bueno.

Tras una pequeña siesta hemos vuelto a la oficina, a dedicar otras cuantas horas de la tarde al trabajo. Ha sido entonces cuando, a falta de dos cuadras (manzanas) para llegar, ha subido la intensidad de la incesante lluvia que caía y nos hemos calado bastante. Se acercaba la noche y la faena se hacía pesada, pero ha sido entonces cuando ha llegado lo mejor de la tarde: dos compañeros que hoy no tenían que trabajar se han acercado a la oficina con un bocadillo de jamón del bueno, con aceite, y recién comprado, que ha conseguido iluminarnos la cara e irnos de la oficina con un buenísimo sabor de boca. Todo un detalle. Finalmente, de camino a casa he encontrado otro de esos carteles que siempre me gusta fotografiar. En este caso era el correspondiente a la prohibición, por ley, de la venta de tabaco a los menores de edad. Con esto y un bizcocho, hasta mañana a las ocho.

No hay comentarios:

Publicar un comentario