07/06/2012. Jueves. Hoy me he despertado a las 7:20h y, como de costumbre, le he echado un vistazo al móvil. He mirado la hora e instintivamente he apretado el icono de twitter. Lo hago normalmente para ver las noticias de las últimas horas. Las he leído sin más y he pasado a mirar los trending topics. Y he visto el nombre de Manolo Preciado. Como buen futbolero que soy, me ha llamado la atención de manera especial, y he pulsado en su nombre. Y entonces he visto todos los tuits que lo ensalzaban. Ha sido así como me he enterado de que había fallecido. Se suele decir que siempre se habla bien de la gente cuando ya no está, pero en este caso todo lo que se diga será con razón. Y más en una persona que ha padecido trances tan complicados como perder a su mujer con un cáncer de piel, a su hijo en un accidente de moto, y a su padre en otro accidente completamente idiota. Me quedaré con una de sus muchas frases: ''Cuando murieron mi mujer y mi hijo tenía dos opciones. Tirarme de un puente o seguir adelante. Decidí lo segundo''. Y con esa lección me quedo.
Por otro lado, aunque no os lo creáis, hoy no he hecho ninguna foto, así que no os “aburriré” colgando ninguna… ¿o sí? Aprovecharé una que tenía ganas de subir hace tiempo. Aquí también tenemos un presentador a lo Carlos Sobera, con su programa “Quiere ser millonario”. Como veréis en la foto, la pregunta no era muy complicada, pero viendo el valor del premio, que eran 500 pesos mexicanos (unos 30 €), se entiende mejor.
En la oficina, el día ha sido largo, ya que como de costumbre hemos tenido reunión de última hora, llegando a casa cerca de las 11 de la noche. Unos cereales, un poco de leche, radio (escuchando a Sergio Busquets), preparar cuatro cosas, y a la cama.
No hay comentarios:
Publicar un comentario